Santa María Magdalena de Pazzi, virgen de la Orden del Carmelo, en Florencia, de la Toscana, en Italia, que llevó una vida de oración abnegadamente escondida en Cristo, orando con empeño por la reforma de la Iglesia, y habiendo sido distinguida por Dios con muchos dones, dirigió de un modo excelente a sus hermanas hacia la perfección († 1607).
Otros santos del día:
• San Beda el Venerable, presbítero y doctor de la Iglesia, el cual, servidor de Cristo desde la edad de ocho años, pasó todo el tiempo de su vida en el monasterio de Wearmouth, en Northumbria, en Inglaterra. Se dedicó con fervor en meditar y exponer las Escrituras, y entre la observancia de la disciplina regular y la solicitud cotidiana de cantar en la iglesia, sus delicias fueron siempre estudiar, o enseñar, o escribir († 735).
• San Gregorio VII, papa, el cual, anteriormente llamado Hildebrando, llevó vida monástica y colaboró en la reforma de la Iglesia en numerosas legaciones pontificias de su tiempo, y una vez elevado a la cátedra de Pedro, reivindicó con gran autoridad y fuerte ánimo la libertad de la Iglesia respecto del poder de los príncipes y defendió valientemente la santidad del sacerdocio. Viéndose obligado a abandonar Roma por este motivo, murió en el exilio en Salerno, de la Campania, región de Italia, († 1085).
• En Atela, en la Campania, también región de Italia, san Canión, obispo y mártir († s. III/IV).
• En Milán, de la Liguria, hoy en Lombardía, región de Italia, conmemoración de san Dionisio, obispo, el cual, habiendo sido desterrado a Armenia por el emperador arriano Constancio a causa de su fe católica, murió allí mereciendo el título propio de los mártires († hacia el año 361).
• En Florencia, de la Toscana, también región de Italia, san Zenobio, obispo († s. IV/V).
• En el cenobio de Mantenay-sur-Seine, junto a Troyes, en la Galia, hoy en Francia, san León, abad († s. VII).
• En Inglaterra, san Aldelmo, obispo, quien, varón célebre por su doctrina y escritos, había sido abad de Malmesbury y después fue nombrado primer obispo de Sherborne, entre los sajones occidentales († 709).
• En Peñalba de Santiago, en la comarca de Astorga, en España, san Genadio, obispo, que antes fue abad y después obispo del mismo lugar. Prestó su consejo a los reyes, pero movido por el deseo del claustro, renunció a la dignidad episcopal para vivir el resto de sus años como monje y a veces como solitario († hacia el año 925).
• En Villamagna, cerca de Florencia, en la Toscana, región de Italia, conmemoración del beato Gerardo Mecatti, quien, siguiendo las huellas de san Francisco, distribuyó sus bienes entre los pobres y, retirándose a un lugar desierto, por amor de Cristo se dedicó a acoger a peregrinos y a ayudar a los enfermos († hacia el año 1245).
• En Montesanto, del Piceno, en Italia, tránsito del beato Gerio, que, habiendo sido antes conde de Lunel, llevó vida solitaria y murió durante una peregrinación santa († hacia el año 1270).
• En Faenza, en la Flaminia, hoy Enmilia-Romana, región de Italia, beato Jacobo Felipe (Andrés) Bertoni, presbítero de la Orden de los Siervos de María, insigne por el don de lágrimas y suma humildad († 1483).
• En Tonquín, actualmente en Vietnam, san Pedro Doan Van Van, mártir, catequista y administrador de la parroquia de Bau No, quien, ya octogenario, en tiempo del emperador Tu Duc confirmó con su sangre la constancia de su fe († 1857).
• En París, en Francia, santa Magdalena Sofía Barat, virgen, que fundó la Sociedad del Sagrado Corazón y trabajó muy afanosamente por la formación cristiana de las jóvenes († 1865).
• En el lugar de Munyonyo, en Uganda, san Dionisio Ssebuggwawo, mártir, el cual, a los dieciséis años de edad, al reconocer ante el rey Mwanga que había enseñado los rudimentos de la fe cristiana a dos personas de su corte, fue traspasado con una lanza por el mismo rey († 1886).
• En Catatlan, territorio de Guadalajara, en México, santos Cristóbal Magallanes y Agustín Caloca, presbíteros y mártires, que, durante la persecución mejicana, confiando firmemente en Cristo rey, alcanzaron la corona del martirio († 1927).
• En Shadaw (Birmania, hoy Myanmar), beatos Mario Vergara, sacerdote profeso del Pontificio Instituto para las Misiones Extranjeras, e Isidoro Ngei Ko Lat, laico y catequista, asesinados por odio a la fe († 1950).
• En el campo de concentración de la ciudad de Javas, en Moldavia, beato Nicolás Cehelski, presbítero y mártir, el cual, bajo un régimen de persecución contra la religión, superó con la fuerza de su fe los tormentos de su martirio († 1951).
(Del Martirologio Romano)